La jornada del lunes dejó a los Gigantes en una posición precaria, pero lograron resurgir con una victoria que ha inyectado un galón de oxígeno temporal a su temporada, poniendo fin a una racha negativa que los perseguía durante años.
Batalla de Gigantes en el Julián Javier
En un enfrentamiento digno de una batalla de sables, donde la voluntad de ambos equipos se mantuvo firme sin ceder terreno, Edwin Espinal emergió como el héroe al conectar un sencillo crucial en la novena entrada.
Este hit dejó en el terreno al Escogido con un ajustado marcador de 8-7, transformando el Julián Javier en el escenario de una victoria memorable.
Rompiendo cadenas: Gigantes contra la adversidad
El resultado no solo representó una victoria para los Gigantes sino que también marcó el fin de una cadena de seis derrotas consecutivas para los francomacorisanos (2-8), que se encuentran en la última posición de las clasificaciones del todos contra todos.
Doble golpe para los Leones
El revés de los Leones (4-6) fue aún más amargo debido al triunfo del Licey (6-4) sobre las Estrellas (8-2) en el Quisqueya, alejándolos a dos juegos del codiciado segundo lugar en la clasificación.
Espectáculo de batazos y errores
El enfrentamiento se caracterizó por una exhibición de poder, con un total de 21 hits, incluyendo cinco jonrones. Sin embargo, la intensidad del juego también se reflejó en la estadística de errores, sumando un total de ocho, de los cuales cinco fueron responsabilidad del equipo ganador.
Manufactura roja: Una iniciativa explosiva
La manufactura de carreras para los Gigantes tuvo inicio en la primera entrada con un sencillo de Héctor Rodríguez. En el turno siguiente, Elier Hernández lanzó un jonrón impresionante, estableciendo una temprana ventaja de 2-0.
Sin embargo, el Escogido igualó rápidamente en su primera oportunidad, aprovechando un error en el tiro de Jorge Mateo tras el embasamiento de Jeimer Candelario. Luego, Marcell Ozuna conectó un cuadrangular para nivelar el marcador.
Cambios de liderato: El juego en constante transformación
Los escarlatas retomaron la delantera en el quinto capítulo con un vuelacercas de Junior Lake, sumando dos carreras a la pizarra. Pero al final de ese mismo episodio, los anfitriones lograron empatar gracias al descontrol de Chester Pimentel, que otorgó una base por bolas con las bases llenas y un posterior rodado de Ozuna que se convirtió en una doble matanza, permitiendo la entrada del corredor desde la antesala.
Cambios constantes: La emoción persiste
En el sexto inning, Olando Calixte conectó un sencillo productor de una carrera después de que Michael Pérez disparara un doble. Nuevamente, los duartianos empataron el juego en su siguiente turno con un sencillo de José Sirí.
Momento crucial: Los Gigantes toman la delantera
Al cierre del séptimo, los cacaotaleros se adelantaron con un cuadrangular del emergente Erick Mejía, que también remolcó a Kelvin Gutiérrez, colocando el juego 7-5.
Revuelta final: Empate y triunfo
La emoción persistió hasta el noveno inning, donde los melenudos lograron igualar la pizarra tras un sencillo de Lake ante Reymín Guduán y un batazo de cuatro bases de Héctor Rodríguez.
La definición llegó al cierre de la novena entrada, cuando Yefri Pérez recibió a Jeurys Familia con un sencillo, Erick Mejía se sacrificó con un toque para avanzar al corredor y, después de una base por bolas a Iván Castillo y un ponche a Francisco Peña, José Sirí recibió otra base por bolas, dejando la mesa lista para que Edwin Espinal conectara un hit al jardín izquierdo, sellando así la victoria.