Los Golden State Warriors están luchando por asegurar un lugar en los playoffs de la NBA esta temporada. A pesar de estar fuera de las posiciones de postemporada en este momento, el equipo de San Francisco sabe que una racha positiva podría cambiar rápidamente su situación.
Con la fecha límite de cambios del 8 de febrero acercándose, el entrenador en jefe Steve Kerr ha expresado su interés en fortalecer el equipo, especialmente en el «backcourt», donde las lesiones han afectado la profundidad del equipo.
Buscando un refuerzo clave
Según informes de NBC Sports, Kerr ha solicitado a la gerencia de los Warriors que busque una pieza de jerarquía para respaldar a Stephen Curry. Con jugadores clave como Chris Paul y Gary Payton II fuera por lesiones desde hace más de un mes, y con Klay Thompson desempeñándose en una posición diferente a la habitual, la necesidad de fortalecer la guardia del equipo es evidente.
El objetivo: Alex Caruso
Los Warriors han puesto sus ojos en Alex Caruso, actualmente en las filas de los Chicago Bulls. A pesar de que ahora defiende los colores de los Bulls, Caruso fue parte del equipo campeón de Los Angeles Lakers en la temporada 2019-2020.
Caruso, conocido por su sólida defensa perimetral, ha mostrado un rendimiento ofensivo destacado esta temporada. Promedia su mejor marca en puntos por partido (10.1), porcentaje de campo (48.6%) y porcentaje de tiros triples (42.1%). Estas estadísticas hacen de Caruso un objetivo atractivo para los Warriors, que buscan fortalecer su plantilla para el tramo final de la temporada.
La situación de Caruso en los Bulls
A pesar de sus contribuciones al equipo, los Bulls pusieron a Caruso en el mercado hace algunos meses, junto con otros jugadores destacados como Zach LaVine y DeMar DeRozan. Sin embargo, hasta el momento, no han recibido ofertas atractivas por él.
Caruso se unió a los Bulls en el verano de 2021 como agente libre, firmando un contrato por cuatro temporadas y 37 millones de dólares. Desde entonces, ha demostrado su valía en ambos lados de la cancha, convirtiéndose en una pieza clave para los Bulls.