El origen de la controversia
En una reciente demanda presentada en un tribunal federal de California, Alan Foster, ex socio de Big Baller Brand, ha desatado una batalla legal contra LaMelo Ball, Puma y otros miembros de la familia Ball. La disputa gira en torno a la línea de zapatillas exclusivas de LaMelo, conocidas como «MB1«.
El reclamo de Alan Foster
Foster afirma haber concebido la idea detrás de las zapatillas «MB1» de LaMelo y haber solicitado varias marcas comerciales relacionadas con ellas. En su demanda, sostiene que LaVar Ball, el padre de LaMelo, intentó transferir las marcas comerciales después de crear una segunda versión de Big Baller Brand.
Además, Foster alega que se infringieron sus marcas registradas cuando LaMelo lanzó su nuevo zapato exclusivo con Puma, llamado «MB.01«.
La participación de LaMelo
Según la demanda, LaMelo desempeñó un papel crucial en la creación de su primer zapato exclusivo con Big Baller Brand. Foster afirma que LaMelo estaba plenamente consciente de las marcas registradas relacionadas con su nombre y ayudó a diseñarlas.
A pesar de esto, alega Foster, LaMelo eligió deliberadamente nombrar su nuevo zapato con Puma como «MB.01«, violando las marcas registradas existentes.
Buscando compensación
Alan Foster busca daños y perjuicios superiores a los 200 millones de dólares en esta batalla legal. Este no es el primer enfrentamiento legal de Foster con la familia Ball, ya que previamente demandó a LaVar y a Lonzo Ball en 2019, alegando malversación de fondos que financiaron un estilo de vida lujoso.
Antecedentes y futuro
Esta nueva disputa se suma a la compleja relación legal entre Alan Foster y los Ball. LaMelo, quien firmó con Puma antes del Draft de la NBA de 2020, ha lanzado tres zapatillas exclusivas hasta la fecha. El resultado de esta demanda tendrá repercusiones significativas en la industria del calzado deportivo y la reputación de las partes involucradas.
La batalla legal continúa, y el destino de la zapatilla exclusiva «MB1» pende de un hilo en los tribunales.