La estrella de los Trail Blazers de Portland, Damian Lillard, ha dejado claro su compromiso con su equipo y su ciudad natal, tomando una decisión sorprendente en el mercado de la NBA. A pesar de los rumores y las tentadoras ofertas, Lillard ha descartado cualquier posibilidad de unirse a los Golden State Warriors, liderados por Stephen Curry.
Un vínculo inquebrantable
Lillard, quien ha dedicado toda su carrera de 11 años a los Blazers, se ha convertido en una figura icónica tanto en la franquicia como en la comunidad de Portland. Su promedio de 25.2 puntos, 6.7 asistencias, 4.2 rebotes y un robo en 769 partidos lo ha catapultado como el líder anotador de todos los tiempos de los Blazers, ocupando un lugar destacado solo por detrás de Terry Porter en asistencias.
El amor por su hogar
En una aparición reciente en el podcast “Es lo que es”, Lillard compartió sus sentimientos sobre la posibilidad de unirse a los Warriors.
“Respeto lo que han estado haciendo durante los últimos ocho, nueve años o lo que sea. Y soy de allí, obviamente, ese es mi hogar. Pero no puedo ser parte de eso”
Expresó el jugador (Lillard)
Un compromiso inquebrantable
El basquetbolista de 33 años ha acumulado una serie de premios individuales a lo largo de su carrera en Portland, incluyendo siete nominaciones al Juego de Estrellas y el prestigioso premio al Novato del Año. Además, Lillard fue honrado como parte del equipo del 75 aniversario de la NBA, lo que demuestra su impacto duradero en la liga.
La prioridad de Lillard
En medio de todas las especulaciones y posibilidades, Damian Lillard ha dejado en claro su lealtad a los Trail Blazers. En palabras contundentes, afirmó: “Prefiero perder todos los años a unirme a los Warriors”. Esta declaración subraya su compromiso inquebrantable con el equipo y la ciudad que lo han visto crecer y triunfar.
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Conclusión
Damian Lillard, el líder incuestionable de los Trail Blazers de Portland, ha reafirmado su conexión con la franquicia y la ciudad que considera su hogar. A pesar de las oportunidades tentadoras, su determinación de permanecer en Portland habla de su arraigada lealtad y su deseo de continuar dejando huella en la NBA como un verdadero icono de los Blazers.
