El icónico LeBron James continúa forjando su camino hacia la inmortalidad en la NBA, y el pasado domingo marcó otro hito en su carrera al asegurarse un lugar entre los líderes históricos en robos de balón.
Un paso más en la historia
En el emocionante enfrentamiento donde los Los Angeles Lakers superaron a los Rockets de Houston con un ajustado marcador de 105-104, LeBron James no solo contribuyó al triunfo de su equipo, sino que también escaló al octavo lugar en la lista de jugadores con más robos en la liga.
Este logro llevó a James a alcanzar la impresionante cifra de 2,205 robos en su carrera, superando a la leyenda del Salón de la Fama, Clyde Drexler, quien se encuentra ahora en el noveno lugar con 2,207 robos.
Una posición destacada para un jugador de la posición y la envergadura de James, ya que generalmente son los bases y escoltas quienes lideran las estadísticas de robos en el baloncesto.
Persiguiendo la historia
El próximo objetivo en la mira de LeBron es nada menos que el seis veces campeón de la NBA, Scottie Pippen, quien ostenta el séptimo lugar con 2,307 robos en su extraordinaria carrera con los Chicago Bulls y los Portland Trail Blazers.
La búsqueda de James por dejar su huella en la historia defensiva de la NBA sigue avanzando, y cada robo lo acerca un paso más a la grandeza.
Más allá de los números
La noche en que LeBron James aseguró su posición entre los líderes de robos no fue solo un evento estadístico. Su impacto en la cancha va más allá de los números, como lo demuestran sus promedios de 25.5 puntos, 8.3 rebotes, 6.3 asistencias y 1.6 robos por partido en la actual temporada.
Con un asombroso 57.2% en tiros de campo y un respetable 39.7% desde la línea de tres puntos en los primeros 12 juegos de la temporada 21 de su carrera en la NBA, James sigue siendo un jugador completo que continúa sorprendiendo a fanáticos y críticos por igual.