Carmelo Anthony, una leyenda de la NBA, ha decidido poner fin a una exitosa carrera de 18 temporadas, culminando su paso con el uniforme de los Los Angeles Lakers.
A lo largo de su trayectoria, Anthony dejó una huella imborrable, especialmente durante su período de mayor rendimiento entre 2003 y 2017, representando tanto a los Denver Nuggets como a los New York Knicks.
El camino hacia la grandeza: Inicios y primeros años en la liga
Si bien Carmelo Anthony es ampliamente reconocido por su tiempo con los Knicks y los Nuggets, es interesante reflexionar sobre lo que pudo haber sido su carrera si las circunstancias hubieran sido diferentes.
En una revelación sorprendente, Anthony compartió en el podcast «The Why with Dwyane Wade» que estuvo cerca de unirse a los Lakers en sus años más jóvenes. Sin embargo, los Nuggets, conscientes del potencial enfrentamiento en playoffs, optaron por enviarlo al Este, lo que allanó el camino para su llegada a Nueva York.
La era de los Knicks: Dominio en la gran manzana
La llegada de Carmelo Anthony a los Knicks en febrero de 2011 marcó el comienzo de una nueva era en su carrera. Durante su paso por la Gran Manzana, Anthony promedió impresionantes 24.7 puntos por partido en seis temporadas y media.
Además, logró capturar una corona de anotación en la temporada 2012-2013 y fue seleccionado para el Juego de las Estrellas en cinco ocasiones, consolidándose como una figura destacada en la liga.
Más allá de los Knicks: Un viaje por diferentes franquicias
A pesar de su éxito con los Knicks, Carmelo Anthony continuó su carrera en otras franquicias, llevando su talento ofensivo al Oklahoma City Thunder, Houston Rockets y Portland Trail Blazers antes de unirse a los Lakers.
A lo largo de su trayectoria, Anthony mantuvo una impresionante media de 22.5 puntos por partido, demostrando su habilidad para marcar la diferencia en cualquier equipo en el que jugara.
Un legado que perdurará en la historia de la NBA
Con su retiro, Carmelo Anthony deja un legado imborrable en la NBA. Su habilidad para anotar puntos y su impacto en cada equipo en el que jugó lo convierten en uno de los jugadores más destacados de su generación. Aunque su tiempo en la liga ha llegado a su fin, su influencia y recuerdo perdurarán en la memoria de los aficionados al baloncesto en todo el mundo.