El respeto y la admiración por Aaron Judge en las Grandes Ligas se han consolidado a lo largo de los años, y este sábado, los Azulejos de Toronto demostraron su temor ante el poder del bateador estrella. En un inusual segundo inning, con dos outs y sin corredores en base, el manager John Schneider optó por otorgarle un boleto intencional.
Antes de este hecho, Judge, capitán de los Yankees de Nueva York, había conectado su jonrón número 41 de la temporada en el primer inning, una decisión que Schneider explicó claramente: «La verdad es que no tenía ganas de verlo batear.
Aaron Judge intentionally walked…with no one on and 2 outs. 😲
That's respect. pic.twitter.com/a3ZIYMZ2Us
— Rob Friedman (@PitchingNinja) August 3, 2024
Hablamos de tener mucho cuidado con él, y eso es lo que puede llevar a errores cuando uno intenta estar realmente bien. Está en una categoría diferente a la de cualquier otro jugador de la liga. Puede cambiar el guion de un partido con un solo swing», declaró Schneider.
El impresionante desempeño de Judge lo ha llevado a ser el primer jugador en la campaña 2024 en recibir un boleto intencional sin compañeros en base, acumulando así ocho pasaportes intencionales y quedando a uno de igualar su récord de 2023. En su temporada como MVP en 2022, recibió 19 boletos intencionales, su máxima marca personal.
Schneider didn't want that smoke from Judge 😂 #RepBX pic.twitter.com/s9xwhmRKaM
— Fireside Yankees (@FiresideYankees) August 4, 2024
Además, el slugger y favorito al MVP de la Liga Americana se ha convertido en el primer jugador en 50 años en recibir una base por bolas intencional con las bases vacías en las primeras dos entradas de un juego, siendo el primero desde 1972 en lograr tal hazaña.
Este tipo de situación es conocido popularmente como el «trato Barry Bonds«, en referencia a la temporada 2004 de Bonds, donde recibió 120 boletos intencionales.
Aaron Judge continúa demostrando por qué es uno de los jugadores más temidos y respetados en el béisbol actual, cambiando el curso de los partidos con su increíble capacidad de bateo y obligando a los equipos rivales a tomar decisiones inusuales para evitar su impacto en el juego.