La expectativa está en aumento para los Los Angeles Lakers de cara a la temporada 2024-25, un equipo que ha decidido apostar por la continuidad en su plantilla a pesar de la eliminación a manos de los Denver Nuggets en los últimos playoffs.
Sin embargo, la incorporación más significativa llega desde el banquillo con la llegada de JJ Redick como entrenador, quien asume su primera experiencia en este rol en la NBA.
Redick, un viejo amigo y aliado de LeBron James, tiene la tarea de llevar a los Lakers a un nivel superior. Su principal reto será gestionar el tiempo y el rendimiento de LeBron, quien a sus casi 40 años sigue siendo una pieza fundamental en el esquema del equipo. La reciente extensión de contrato de James, por dos años y 101.3 millones de dólares, refuerza su papel como líder indiscutible de la franquicia.
Uno de los objetivos principales de Redick será aprovechar al máximo las habilidades de James mientras se cuida su físico. La temporada pasada, LeBron promedió 25.7 puntos, 7.3 rebotes y 8.3 asistencias en 35.3 minutos por juego, una muestra de su vigencia y capacidad para influir en todas las facetas del juego.
La estrategia de Redick podría incluir un enfoque en la eficiencia de James desde la línea de tres puntos, donde mostró un notable desempeño al superar el 40% de aciertos. «Quiero que tire triples», ha afirmado Redick, insinuando una adaptación en el estilo de juego de LeBron para maximizar su impacto ofensivo.
Otro aspecto emocionante para los Lakers y sus seguidores es la posibilidad de ver a LeBron compartiendo cancha con su hijo, Bronny James, seleccionado por el equipo en el último Draft de la NBA. Este hecho no solo representa un hito emocional para LeBron, sino que también agrega una capa adicional de motivación para la próxima temporada.
La integración de Redick como estratega no solo se centra en LeBron, sino en elevar el rendimiento colectivo del equipo. Con una mezcla de juventud y experiencia, los Lakers buscarán volver a la élite de la liga. La pregunta que queda por responder es si la conexión Redick-James puede ser el catalizador para una temporada exitosa y, posiblemente, un nuevo título para la franquicia.