A pocos juegos de finalizar la temporada regular, los Dodgers de Los Ángeles enfrentan una posible baja importante. Miguel Rojas, infielder venezolano, ha tenido que lidiar con una lesión en la ingle izquierda, y la situación empeoró durante el último encuentro contra los Padres de San Diego.
El miércoles, mientras corría desde la primera hasta la tercera base, Rojas sintió un incremento del dolor que ya lo venía afectando en las últimas semanas.
Aunque fue revisado en el campo por el personal médico, intentó continuar jugando, pero fue reemplazado en el quinto inning por Tommy Edman, bajo decisión del mánager Dave Roberts.
Tras el partido, el venezolano habló con la prensa y manifestó su deseo de volver para el último juego de la temporada regular, que será ante los Rockies de Colorado.
«Trataré de calmar la lesión con una inyección de cortisona y estar listo lo antes posible. Mi objetivo es jugar al menos un partido antes de que termine la temporada, pero lo más importante son los playoffs»
comentó el oriundo de Los Teques.
Este jueves, una resonancia magnética reveló un desgarro en el músculo aductor izquierdo, lo que requerirá cirugía en la temporada baja. Aunque la lesión podría comprometer su regreso inmediato, Rojas espera estar disponible para la postemporada, donde los Dodgers ya tienen asegurada su participación.
Con una sólida temporada a sus espaldas, Miguel Rojas ha sido clave para los Dodgers, acumulando un promedio de bateo de .283 en 103 juegos, con 87 hits, 21 dobles, seis cuadrangulares y 36 carreras impulsadas.
Su presencia en la defensa y en la alineación podría ser decisiva de cara a los playoffs.
A pesar de la lesión, el venezolano se mantiene positivo, confiando en poder aportar en los últimos partidos de la temporada regular. Sin embargo, la incertidumbre sobre su estado físico añade presión al equipo de Los Ángeles, que buscará competir al máximo en octubre.