La adaptación a un nuevo equipo puede ser una tarea ardua para cualquier jugador de béisbol profesional. Para Harrison Bader, el jardinero de los Mets de Nueva York, este desafío se ha convertido en una lucha constante en su primera temporada con el club.
La frustración en aumento
Desde su llegada a los Mets, Bader ha expresado abiertamente su creciente frustración por su papel disminuido en el equipo. A pesar de su compromiso y dedicación, se enfrenta a limitaciones significativas en cuanto a tiempo de juego.
En una reciente entrevista con Mike Puma del New York Post, Bader compartió sus sentimientos sinceros:
«No lo manejo bien, te lo puedo asegurar… Pero ciertamente no dejo que eso afecte la forma en que me preparo, la forma en que me mantengo concentrado cuando tengo la oportunidad de entrar y jugar, incluso si es más tarde en el juego. En todo caso, enciende más un fuego. ‘Estoy seguro de que me molesta».
La competencia en el jardín
Los Mets de Nueva York cuentan con una alineación sólida en los jardines, con jugadores como Brandon Nimmo y Starling Marte asegurando posiciones clave. La gestión del manager Carlos Mendoza ha llevado incluso a la rotación de otros jugadores en estas posiciones, lo que ha complicado aún más las oportunidades de juego para Bader.
«Quiero ganar, pero quiero jugar. Todos queremos jugar, pero es difícil. Tenemos muchos muchachos y respeto la posición en la que están todos… No sé quién está en la alineación, pero lo que sea que tengamos que hacer, lo respeto»
comentó Bader sobre el desafío de la competencia en el equipo.
El contrato y las estadísticas
Bader llegó a los Mets con un contrato de un año y $10 millones, pero su participación en el campo ha sido limitada en comparación con sus expectativas. A pesar de iniciar 26 de los 36 juegos de la temporada, gran parte de su tiempo se ha dedicado a entrar como bateador emergente en las últimas entradas.
Con una línea de .280/.314/.340 y estadísticas moderadas en jonrones, carreras impulsadas y bases robadas, Bader busca hacer valer su potencial en cada oportunidad que se le presenta.
La visión del manager
Es interesante destacar que el actual manager de los Mets, Carlos Mendoza, tuvo una relación previa con Bader cuando ambos estaban en los Yankees de Nueva York. Sin embargo, a pesar de su versatilidad y habilidades, Mendoza no ve a Bader como un jugador de todos los días en la alineación actual del equipo.
