En un movimiento estratégico para contrarrestar las deficiencias de su cuerpo de relevistas, los Orioles de Baltimore anunciaron la adquisición del lanzador derecho Luis Felipe Castillo desde los Marineros de Seattle.
La transacción, que incluyó compensación económica, refleja la urgencia del equipo por mejorar un bullpen que ha mostrado debilidades críticas en las primeras semanas de la temporada 2025 de la MLB.
Castillo, de 29 años, llega a Baltimore tras un complicado inicio de campaña con los Marineros, donde registró una efectividad de 7.71 en solo 7 entradas lanzadas. Sus números –incluyendo un WHIP de 2.714– revelan problemas para contener a los bateadores rivales, situación que la directiva de los Orioles espera revertir mediante un cambio de entorno y metodologías de entrenamiento.
Para dar espacio en su plantilla de 40 jugadores, el equipo designó para asignación al lanzador zurdo Walter Pennington, quien había tenido participaciones limitadas este año.
Experiencia internacional como factor clave
El dominicano acumula experiencia tanto en las Grandes Ligas como en la Liga Profesional de Béisbol de Japón, aunque no había actuado en la MLB desde su etapa con los Tigres de Detroit en 2022.
Su versatilidad para desempeñarse en múltiples roles dentro del bullpen –incluyendo situaciones de alta presión– fue un elemento valorado por el gerente general Mike Elias durante las negociaciones.
Impacto en la dinámica del equipo
Castillo se unirá a relevistas como Seranthony Domínguez, Yenier Cano, Gregory Soto y Félix Bautista, conformando un grupo que busca mayor consistencia.
Aunque sus estadísticas recientes generan escepticismo, los analistas destacan su velocidad promedio de 95 mph en la recta y su curva con movimiento vertical –herramientas que podrían florecer bajo la tutela del coach de lanzadores Darren Holmes.
