En el umbral de la nueva temporada de la MLB, el ganador del premio Cy Young del año pasado, Blake Snell, se encuentra en una encrucijada.
A pesar de su destacada actuación en la sucursal de Doble A de los Gigantes de San Francisco, donde demostró su destreza con 71 lanzamientos en cuatro entradas, el zurdo aún espera su oportunidad en el equipo principal.
La incertidumbre rodea el debut de Snell con los Gigantes en esta temporada. A pesar de su impresionante desempeño en los entrenamientos, el mánager Bob Melvin ha optado por no apresurar su inclusión en la rotación. Según Melvin, la tardía incorporación de Snell al equipo sin una pretemporada adecuada es el principal motivo de esta decisión.
Blake Snell compartiendo con sus excompañeros de equipo de los Padres. 🤩#OpeningDay pic.twitter.com/oGMJ0yJSRz
— LasMayores (@LasMayores) March 28, 2024
Sin embargo, Snell se muestra tranquilo ante esta situación. Expresó su disposición a seguir trabajando en todos los niveles de la organización para alcanzar su máximo rendimiento.
Me siento bien. Solamente necesito más repeticiones, mejorar cada vez más e irme fortaleciendo. Cuando salgamos al terreno, ahí será cuando realmente se verá dónde estoy y en qué necesito trabajar. Mejoraré a partir de ahí”
comentó el lanzador zurdo.
La próxima serie de los Gigantes contra los Dodgers de Los Angeles está en el horizonte, y aunque Keaton Winn ha sido designado como lanzador para el primer juego, el resto de la rotación aún no está definido. Según fuentes de MLB.com, Snell podría ser la opción principal para el juego del miércoles.
Los comienzos de temporada no son nuevos para Snell, quien enfrentó dificultades similares en el pasado. Durante abril de 2023, mientras jugaba para los Padres de San Diego, su efectividad cerró en 5.48.
Sin embargo, a medida que avanzaba la temporada, Snell mostró un crecimiento significativo, culminando con un impresionante 2.25 de efectividad, el mejor de todas las Grandes Ligas.
Bob Melvin, quien anteriormente dirigió a Snell en los Padres, reconoce los desafíos que enfrenta el lanzador al inicio de la temporada. «No hablamos de eso, pero estoy consciente de ello», comentó Melvin. «Él también lo sabe», agregó, señalando la familiaridad que tiene con Snell como manager.
El traslado de Snell a los Gigantes en marzo pasado generó expectativas significativas. Firmó un contrato por 62 millones de dólares y dos años de duración, mostrando la confianza del equipo en su habilidad y potencial para contribuir al éxito de la temporada. Sin embargo, su debut en el campo principal sigue siendo una incógnita, mientras el zurdo continúa trabajando para estar en óptimas condiciones.