Saúl «Canelo» Álvarez, el destacado boxeador mexicano, está en plenos preparativos para su próxima defensa de título, programada para el 14 de septiembre en Las Vegas. En esta ocasión, Álvarez se enfrentará a Edgar Berlanga en un combate obligatorio para preservar su título de peso supermediano.
Este enfrentamiento está en concordancia con las regulaciones establecidas por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que exige a los campeones defender sus títulos en un plazo de 9 meses, con una excepción extendida a 12 meses para los pesos pesados. La última defensa de Canelo se realizó en mayo, cuando superó a Jaime Munguía, consolidando así su estatus de campeón.
El Consejo Mundial de Boxeo (WBC), encargado de regular los campeonatos mundiales en el boxeo, también tiene directrices específicas para los campeones. Según sus normas, un campeón del WBC debe realizar al menos tres defensas del título al año, ya sean obligatorias o voluntarias, a menos que se otorgue una excepción por escrito o una prórroga a discreción del WBC.
Canelo es reconocido por su fuerte carácter y por elegir cuidadosamente a sus oponentes, una ventaja derivada de su extensa trayectoria. No obstante, esta flexibilidad también le ha jugado en contra. En 2019, Álvarez perdió el Campeonato Mundial Medio de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) debido a la falta de una pelea programada, un hecho que fue ampliamente criticado.
En respuesta a esta situación, la promotora Golden Boy – que anteriormente gestionaba la carrera de Álvarez – emitió un comunicado expresando su descontento con la FIB. La declaración de Golden Boy denunciaba la decisión de la FIB como un «insulto al boxeo» y a los aficionados de este deporte a nivel mundial, compartiendo el desagrado del propio boxeador por la situación.
Canelo se prepara para demostrar una vez más su habilidad en el ring y defender su título, mientras los fanáticos esperan con expectativa este emocionante combate.