La directiva de los Tigres del Licey ha optado por mantener la estabilidad en su banquillo: Gilbert Gómez seguirá al mando del equipo como mánager durante la temporada 2025-2026 de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM). La confirmación llegó de voz de Audo Vicente, gerente general del club, durante una conversación con medios deportivos en plataformas digitales.
Para Gómez, este renovación representa un voto de confianza tras una gestión destacada. En su debut como director en la LIDOM durante la campaña anterior, logró un hito histórico: conquistar el vigésimo cuarto campeonato de la franquicia tras un épico noveno juego contra las Estrellas Orientales. Su habilidad para unir a un grupo diverso de talentos y gestionar presiones en momentos clave fue determinante para este triunfo.
Audo Vicente recalcó que la continuidad del estratega es fundamental para consolidar un proyecto a largo plazo.
“Estamos convencidos de que su visión y metodología son pilares para mantener nuestra competitividad”
afirmó el ejecutivo.Entre los desafíos inmediatos para Gómez están la selección de refuerzos estratégicos, la optimización del roster y el manejo de la fatiga de los peloteros, un aspecto crítico en torneos de alta exigencia.
El objetivo institucional es claro: alcanzar la Serie Final por tercer año consecutivo y luchar por el ansiado título 25, que reafirmaría al Licey como el equipo más laureado de la liga. La afición azul, reconocida por su fervor y altas expectativas, espera que Gómez replique su fórmula ganadora.
Con una trayectoria que incluye experiencia en ligas menores y un enfoque táctico innovador, Gilbert Gómez ha demostrado ser más que un estratega: es un gestor de talentos.
Su capacidad para conectar con los jugadores y adaptarse a escenarios complejos —desde lesiones inesperadas hasta ajustes en la alineación— ha sido clave en su éxito. Esta renovación no solo garantiza estabilidad técnica, sino que refuerza la identidad del equipo bajo una filosofía cohesionada.
La próxima temporada pondrá a prueba si el binomio entre Gómez y la dirección del Licey puede escribir otro capítulo glorioso en el libro de oro del béisbol dominicano.
