El talento de los Acuña sigue dejando huella en las Grandes Ligas. Luisangel Acuña, prospecto de los Mets de Nueva York, ha dado un giro estratégico en su carrera al asumir el jardín central, una posición que subraya su adaptabilidad y lo acerca al estilo multifacético de su hermano mayor, Ronald Acuña Jr., figura estelar de los Bravos de Atlanta.
Un cambio estratégico con raíces familiares
Aunque Luisangel acumulaba experiencia como infielder, su transición al jardín central no es improvisada. Con 35 juegos previos en esta posición en ligas menores y participación en torneos invernales, el venezolano demostró solvencia en su debut en el T-Mobile Park.
Este movimiento no solo amplía su valor para los Mets, sino que evoca comparaciones inevitables con su hermano, cuyo dominio en los jardines lo ha consolidado como uno de los jugadores más explosivos de la MLB.
Estadísticas comparativas: Estilo vs. Potencia
Tras su debut en 2024, Luisangel ha registrado en sus primeros 50 partidos un promedio de .287, con 33 hits, 7 dobles y 7 bases robadas. Aunque su poder ofensivo aún no iguala al de Ronald Acuña Jr. (quien en el mismo tramo inicial conectó 9 jonrones y 24 impulsadas), su velocidad y precisión defensiva lo perfilan como un activo multidimensional.
La mecánica de bateo de ambos hermanos revela similitudes técnicas, pero Luisangel enfatiza un juego más táctico, priorizando el contacto y la movilidad. «La defensa y la velocidad son mis herramientas para impactar», ha señalado el joven, quien busca equilibrar la influencia de su hermano con su propia identidad deportiva.
El futuro de los Acuña en el diamante
Mientras Ronald Acuña Jr. continúa su reinado como referente ofensivo, Luisangel explora un camino distinto. Su adaptación al jardín central podría acelerar su consolidación en las Mayores, especialmente si mantiene su promedio de bateo y mejora su capacidad de lectura en el campo exterior.
Los Mets apuestan por esta versatilidad para enriquecer su alineación, y los fanáticos ya imaginan duelos épicos entre los hermanos en futuros encuentros Mets-Bravos. Por ahora, Luisangel escribe su propia historia: una que mezcla herencia familiar, reinvención posicional y la búsqueda de excelencia en la MLB.
